Siendo ambas de las plagas más comunes, especialmente en verano, presentamos una serie de tratamientos relacionados con las moscas y los mosquitos.

Moscas:
Las moscas se pueden controlar en dos de sus estadios, larva y adulto siendo el que mejores resultados da el control de las larvas.
Control de larvas:
Las larvas de las moscas siempre se encuentran viviendo y alimentándose en materia orgánica en descomposición, ya sea de origen vegetal o animal. Por tanto es muy importante:

  • Eliminar todos aquellos alimentos/desperdicios en los que las moscas adultas puedan poner sus huevos.
  • Intentar localizar todas aquellas áreas húmedas con basuras que sirvan de criadero para estas larvas, para eliminarlas.
  • Aplicación de insecticidas o mejor de larvicidas en esas áreas húmedas donde se desarrollan estas larvas.

Control de adultos (se pueden realizar tratamientos químicos):

  • Mediante nebulización: para eliminar a unos pocos adultos, pero no es la medidas más efectiva.
  • Tratamientos residuales en los sitios donde se posen las moscas.
  • Utilización de telas mosquiteras en puertas y ventanas.
  • Atrapamiento mediante trampas de luz ultravioleta que las atraen y las eliminan por electrocución o bien por inanición quedan pegadas en tabas con pegamento).

Mosquitos:
La prevención contra estos insectos es muy difícil por no decir imposible, ya que pueden llegar a volar grandes distancias ayudados por corrientes de aire. El método de control más eficaz son los tratamientos larvicidas. En las zonas más afectadas se recomienda la colocación de mosquiteros en puertas y ventanas.

En cuanto a los tratamientos adulticidas, el más adecuado es la nebulización y/o termonebulización tanto dentro de las instalaciones como en la vegetación en los exteriores, ya que durante el día los mosquitos descansan al abrigo de esta.