Hoy tratamos dos de los servicios que de forma más común necesitan nuestros clientes, es el caso de la Desratización y Desinsectación de zonas.

Vamos a tratar …

Desratización
Consistente en la prevención y control de invasiones de roedores. Realizados mediante sistemas de intervención que nos permiten detectar, monitorizar y determinar el método de control para prevenir o erradicar posibles anidamientos de roedores en las instalaciones.
Los métodos de control de roedores, ponen en juego diferentes técnicas complementarias entre sí:

 

  • Un sistema de puntos de control, constituidos por portacebos y/o trampas de captura, cuando son permitidos, contribuye a establecer una serie de anillos que configuran distintos grados de protección en la zona a tratar.
  • El uso de portacebos de variados diseños y niveles de seguridad, unidos a cebos con distintos atrayentes y formulaciones, ofrecen un amplio abanico de soluciones, adaptable a cada problemática concreta. Las trampas de captura, en sus distintas presentaciones, suponen una interesante alternativa frente a la utilización de cualquier sustancia nociva, que debe ser valorada en cada caso.

Desinsectación
Formadas por plagas de insectos, que producen enfermedades, las cuales, pese a ser todas molestas, pueden además llegar a tener graves consecuencias. Para un mejor conocimiento de las mismas, así como de sus síntomas, facilitamos el siguiente recuadro de plagas con las enfermedades que conllevan, a modo informativo:

PLAGAS

ENFERMEDADES QUE CAUSAN

Moscas,cucarachas,etc

Salmonelosis

Moscas,cucarachas,etc

Abscesos y forúnculos

Mosquitos

(Anopheles spp)

Malaria

Tábanos

Tularemia

Piojos

Tifus,fiebre

Pulgas

Peste, Tifus, Dipylidiasys

Para prevenir las posibles plagas se tienen en cuenta una serie de medidas dirigidas a prevenir y eliminar asentamientos de insectos y otros artrópodos que pueden ser vectores de transmisión de enfermedades para el hombre.

El conocimiento de las tecnologías punteras en control integrado, se traduce en una elección “a medida” para cada problema en su entorno, minimizando el uso de plaguicidas, así como los plazos de seguridad que deben cumplirse.
En este sentido, cobran cada vez mayor protagonismo las trampas diseñadas especialmente para cada tipo de insecto, con atrayentes sexuales y/o alimenticia, capaces de realizar otras técnicas de control complementarias, así como de ayudas en la identificación de insectos y en la determinación de sus focos.